“El mago de los sonidos de la Tierra”
Llevo días añorando el mar. Quizás ese es el motivo de que me haya refugiado esta noche en Paul Winter , desde mi punto de vista mucho más que un músico. Supe de él hace muchos años, cuando la New Age empezaba instalarse en mi casa. Lo escuché y me adoptó de inmediato. “Callings” (Llamadas) fue lo primero que saboreé de este saxofonista de Pensilvania, una auténtica sinfonía marina construida por un músico concienciado, cuya fama iba creciendo paulatinamente y cuyos méritos son incuestionables, como músico y como ecologista. Las ballenas eran seres fascinantes, pero saber que había un músico haciendo música con cantos de ballenas me parecía increíble.
Proveniente del mundo del jazz, su fusión con la world music supuso que el melancólico sonido de los instrumentos de viento empezara a dominar el tempo de sus composiciones, dotándolas de un espíritu libre y ecológico. Sus temas acaban siendo una conjunción de música y naturaleza: un bosque, un océano, un paraíso en el que el ritmo lo ponen por igual las olas o los truenos que la percusión, y donde la melodía puede proceder de un saxo, del aullido de un lobo o del canto de una ballena. Lo podéis comprobar en su discografía.
Es tal la fascinación que provoca que ha sido capaz de trabajar con gran cantidad de intérpretes: Glen Vélez, Paul Halley, David Darling, Paul McCandless, Ralph Towner, Glen Moore, Collin Walcott, Nancy Rumbel, Jim Scott, Rhonda Larson, Russ Landau, Eugene Friesen, Susan Osborn, Arto Tuncboyaciyan, Paul Sullivan, Mickey Hart, Oscar Castro-Neves, Nóirín Ní Riain, Jordan Rudess, Davy Spillane.
"Callings" es el resultado de varios años de investigación con mamíferos marinos, en especial con ballenas, y supone un hermoso y relajante, incluso optimista (que en estos tiempos no viene mal) encuentro con estos seres que se encuentran permanentemente en peligro de extinción. Para hacer boca, Seal Eyes la pieza del disco que me cautivó, que dura 6:30 pero que goear me la ha dejado en 2:53. Lástima.
En esta fiesta acuática, tres temas más: Lullaby from the great mother whale for the baby seal pups (Canción de cuna de la Abuela ballena a las crías de foca) una auténtica nana entre ballenas y focas, que crea emotivos y continuos diálogos entre los instrumentos (saxo, oboe, guitarra, cello, piano, órgano) y la naturaleza.
(A partir de ahora cerrad los ojos; los videos no son nada buenos)
Sea Joy (Mar Alegría)
Sea Joy (Mar Alegría)
Y Magdalena
Para acabar os invito a investigar sobre su música y especialmente sobre los eventos del “Winter Solstice” que se vienen celebrando desde hace 32 años.
El video Lullaby from the great mother whale for the baby seal pups, me encanta las imagenes son geniales y la música de fondo me gsuta mucho. Besos
ResponderEliminarLo es. Y la música también. Ese saxo... Aunque el que a mí más me gusta, sin duda, es el tema Seal Eyes pero no lo he encontrado en ningún sitio, sólo el goear y, ya ves... cortado...
EliminarLos otros dos se tienen que escuchar con los ojos cerrados porque los videos no valen nada, ya lo digo en el texto. Pero no encontré otra manera de compartir la música.
Piensa que es un LP de 1980, de cuando éramos jóvenes, felices e indocumentados. Desde entonces Winter a publicado muchísimos álbumes a cada cual mejor. Algún día seguro que volverá a este espacio pero cuando el mar me llama qué mejor que... callings (llamadas) :)
Un besote.
La música y la Naturaleza...la música y el mar; mágica conjunción. Cuánto sabes amiga, compañera...colega!!! Un beso y gracias por acercarnos a nosotros toda esta belleza. Ángeles
ResponderEliminarHay días que me gustaría dejar de ser quien soy y alejarme de la lucha a pecho descubierto que estamos viviendo.
EliminarHay personas que viven ajenas a la realidad y pueden disfrutar mucho más que nosotras de cosas como ésta sin necesidad de huir de ella.
La vida y la Naturaleza son hermosas pero sólo en la búsqueda de la belleza ajena a la verdad encontramos la paz.
Es injusto.
Pero cuánto con tan poco nos haces disfrutar, Victoria.
ResponderEliminarImpresionada, ¡aun con los ojos abiertos!
Un fuerte abrazo
Querida Pilar. ¡Qué alegría reencontrate por aquí! Me gustaría aparecer más pero estoy tan debilucha que me prodigo poco.
EliminarEcho de menos mis momentos musicales como echo de menos mis viajes en tu Autocare. Sin embargo, las "baterías" cada vez están más bajas y llego fatal al final del día.
Pero le queda poco. Muy poco. 20 días, no más. Lo bueno es que esto tiene fecha de caducidad. La estoy esperando con verdadera ansiedad.
Gracias por estar ahí.
Un besazo.