La voz del Sudán
En los blocs
de música como este no es común escuchar el trabajo de una cantante de Sudán, el país más extenso
de África y de mayoría musulmana, castigado por la pobreza, por la guerra civil
y por la esclavitud de muchos. Sin embargo, la voz de Rasha ha cautivado por igual a
públicos europeos, africanos y americanos.
Esta cantante
y percusionista nació Omdurmán,
cerca de Jartum, capital de
Sudán, un país imbuido en la más larga guerra del continente africano,
gobernado por una dictadura militar islámica y con un conflicto, el de Darfur, que ha desplazado a más
de dos millones de personas y contabiliza miles de víctimas de genocidio. Proviene
de una familia de artistas y, por esa razón, fue criada y educada como tal.
Entre sus hermanos hay pintores, actores, directores de teatro y músicos.
Posteriormente
participó en “La sal de la vida” (Nubenegra, 97) junto a Uxía y María Salgado. Y en 1999 el disco “La
Banda Negra” una iniciativa de Manuel Domínguez, director del sello, en el que
Rasha se une con otros artistas africanos (todos ellos afincados en Madrid, como
Wafir Seydu y Bidinte) que reunió a músicos africanos residentes en España:
su hermano Wafir, Bidinte de Guinea Bissau, Seydu de Sierra Leona y los hermanos As, Mass y Pap, componentes de
Djanbutu Thiossane de Senegal. Con ellos realiza una gira centroeuropea que
culmina con su presentación en el Womex´99. Pero Rasha no se quedó allí, sino
que amplió los horizontes musicales incorporando otros géneros internacionales.
En este aspecto fue importante la participación del músico español Elíseo Parra.
A finales de
2000, se edita “Let me be”, el segundo disco en solitario de Rasha, en el que
ella misma es autora de las letras, siendo de Patxi
Pascual las composiciones musicales y la producción artística, un trabajo
más personal, en el que Rasha denuncia la situación actual del pueblo sudanés, la
esclavitud, los problemas a los que se enfrentan miles de emigrantes y expresa sus
experiencias personales como emigrante, sus frustraciones y sus
ilusiones, sus nostalgias y anhelos íntimos. Patxi, que ya puso algún saxo en
Sudaniyat, lleva desde entonces trabajando con Rasha. La compenetración que se
ha establecido entre ambos le ha capacitado para dar forma a las inquietudes
musicales de la cantante con unas composiciones que sustentan a la perfección
sus textos. El título del disco, “Let me be” (Déjame ser) se refiere al hecho
de ser mujer. “Creo que cualquier mujer en el mundo ha sentido la necesidad de
decirle eso a alguien. Y no forzosamente a un hombre. No se trata de un
discurso feminista”.
En la canción My girl habla de hombres que necesitan
ponerse corbatas y de otros que se dejan largas barbas: “Para mí son la misma cosa. Los
nombres que ponemos a las cosas nos despistan un poco, nos confunden y nos alejan
de lo que sucede realmente”
Para que el
mensaje, lanzado a los cuatro vientos, pueda ser escuchado en todas partes,
Rasha canta, además de en su lengua vernácula, también en inglés y en
castellano “En el disco hay algo de reivindicación y de denuncia. Cuento lo que
llevo dentro y, si a alguien le sirve de algo, pues mejor. No pretendo hacer la
revolución, pero sí despertar conciencias”
El compromiso
con su país y la posibilidad de acercarse a la gente le han permitido
involucrarse en causas por los derechos humanos y de los refugiados. En 1998
participó en un concierto celebrado el día de la mujer trabajadora, que se
llevó a cabo en el edificio de las Naciones Unidas en Nueva York. Ese mismo año
viajó a Argelia para cantar en un campo de refugiados en el marco del
"Sahara in the Heart" Festival. Junto a La Banda Negra, participó en
un concierto en España organizado por la ACNUR (Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Refugiados).
El 14 de
diciembre de 2000, Rasha es invitada a participar en el festival "Refugee
Voices" que tuvo lugar en el teatro Bâtiment des Forces Motrices de
Ginebra coincidiendo con el 50 aniversario de ACNUR, y en el que se dieron cita
artistas de la talla de Youssou
N´Dour o Geoffrey Oryema acompañados por
una fenomenal banda de músicos refugiados. Posteriormente, y tras el éxito de
este festival, ACNUR impulsó la grabación del CD "Refugee Voices",
grabado en los estudios de Youssou N´Dour en Dakar, quien se encargó de la
dirección y producción del mismo, y en el que Rasha es de nuevo llamada a
participar.
La siguiente canción
fue una respuesta directa a la desobediencia civil en Sudán a principios de
diciembre de 2016. Desde su hogar en España, Rasha dijo: "Quería
contribuir y tomar medidas, y lo mejor que puedo hacer es cantar, entonces esta
canción es para mi gente en Sudán y mi gente en todo el mundo. El Sudán que
queremos se puede lograr, es una realidad y es NUESTRO momento. Esta canción es
pidiendo a todos que no pierdan la esperanza, no se desanimen porque el cambio
no siempre sucede rápidamente. ¡Esta es mi canción para ustedes, para Sudán!
El video está grabado en el Small Room Studio de Madrid. La letra es de Osman
Bushra; la música de Sadig, Wafir y Rasha, lo arreglos y la guitarra de Javier
Crespo; al bajo, Pato Muñoz y al saxofón su inseparable Patxi Pascual. Una
delicia.
Hemos sumado otra voz
femenina a nuestra música nocturna. Espero que os haya gustado. Buenas noches.
Bona nit. Καληνύχτα. مَساءُ الخَير . Gabon. 굿나잇. Boas
noites. 晚安 グッドナイト Buonanotte. לילה
טוב. Oíche mhaith. Wengi alus.
Fuentes
http://nubenegra.com/phone/rasha.html
http://nubenegra.com/let-me-be.html
http://es.globedia.com/rasha-sudaniyat-sudan-192k
https://www.discogs.com/artist/304749-Rasha