En algún lugar
del mundo, en un auditorio cualquiera, seguro que hoy se está escuchando "Mesías" de Georg Frideric
Haendel, quizás la composición para coro y orquesta más amada
universalmente jamás escrita. Hoy es el cumpleaños de Jesús, mi Jesús. Una de
las mayores ilusiones que tiene para el año que viene es poder asistir a la Parroquia de Sant Esteve de Granollers, para gozar de esta maravillosa y espectacular obra. Por ello
le dedico hoy esta entrada. Feliz cumpleaños, cielo.
“Mesías” (una
curiosidad es que el nombre original no llevaba artículo) se escribió en un
momento crucial de la carrera de Haendel. Hasta ese momento había sido más
conocido por su ópera,
pero el gusto del público estaba cambiando. Los oratorios estaban de moda: son
obras dramáticas para solistas, coro y orquesta, que cuentan una historia, pero
sin puesta en escena ni actuación. El oratorio de Haendel se estrenó el 13 de abril
1742 cuando el compositor, nacido en Alemania, era el compositor preeminente en su hogar
adoptivo del Reino Unido. El nombre de Haendel atrajo a tal multitud en su
estreno en Dublín que a los miembros de la audiencia se les aconsejó que
dejaran sus faldas de aro y espadas en casa por problemas de espacio. Fue un éxito inmediato.
Haendel
escribió la versión original de “Mesías” en tres o cuatro semanas. La mayoría
de los relatos históricos estiman que el compositor pasó solo 24 días
escribiendo el oratorio, entre el 22 de agosto y el 14 de septiembre de 1741. A
diferencia de Bach,
que podía pasarse varios años para acabar un oratorio, Haendel poseía una
rapidez casi sobrehumana, solo igualada por Mozart, Rossini o Donizetti, aunque
salvando las distancias entre época y género. A pesar de la velocidad con la
que fue compuesta, en ningún momento hay en su música indicios de prisa o falta
de acabado.
El bibliotecario Charles Jennens, que era un amigo cercano y colaborador de Haendel, fue quien usó las historias bíblicas de Jesús para el texto. “El Mesías” no fue nunca una composición cerrada. Haendel reescribió muchos de sus números en función de las disponibilidades con las que contaría en cada interpretación: calidad de los solistas, número de instrumentistas... A tenor de los documentos que quedan (facturas, programas, particellas etc.) podríamos decir que cada interpretación de este oratorio era un reestreno del mismo. De hecho hay muchísimas versiones según los directores.
“El Mesias” se
diferencia de los otros oratorios de Haendel en que no contiene una narrativa global. Desde la órbita protestante, este oratorio no solo aborda el nacimiento de
Cristo, sino que alude, también, a otros momentos clave en el cristianismo como
la profecía de Isaías, la pasión, muerte, resurrección, ascensión y recepción
en los cielos de Cristo, la posterior predicación del evangelio, sus enseñanzas
y el día del juicio. Sorprende, pues, que a pesar de que desde el siglo XIX "Mesías" se ha
convertido en un elemento tradicional del mes de diciembre, este oratorio no es
una pieza navideña ya que solo el primer tercio de la obra trata sobre el
nacimiento de Jesús. Como tal, la pieza se concibió originalmente como una obra
para Semana Santa y se estrenó en primavera durante la temporada de Cuaresma.
Su estructura sigue el año litúrgico: Parte I correspondiente al Adviento, Navidad y la vida de Jesús; Parte II con Cuaresma, Pascua, Ascensión y Pentecostés; y la Parte III con el fin del año eclesiástico, que trata del fin de los tiempos. El nacimiento y la muerte de Jesús se cuentan con las palabras del profeta Isaías, la fuente más destacada del libreto. El libretista organizó su compilación en “escenas”, cada una centrándose en un tema. La única "escena" navideña del oratorio es la anunciación a los pastores que está tomada del Evangelio de Lucas. Vamos allá.
De la primera parte quiero destacar el coro And the glory of the Lord. El original tiene una gran alegría y vivacidad, lejos de los pesados tempos que le imponen algunos directores.
Seguiremos con la primera gran aria de este oratorio, Ev'ry valley en el que se muestra lo que ocurrirá cuando la gloria del señor sea revelada.
Otra de las perlas de esta primera parte, el aria But who may abide; uno de los números que tiene múltiples versiones.
La “escena” que habla del nacimiento del Mesías, lo hace con una especie de Sinfonía Pastoral. En estas minúsculas piezas se cita, como he dicho antes, el evangelio de San Lucas, la anunciación a los pastores, y se da pie al grandioso coro Glory to God.
La segunda parte es, de lejos, la que más imágenes contiene sobre la vida de Cristo y la que transmite unos mensajes más profundos; sin embargo, se ha visto desplazada por la primera en virtud de los coros más brillantes de aquella. Fijemos la atención en el aria de contralto, He was despised, que anticipa la incomprensión que el Mesías recibirá de sus contemporáneos. En el estreno de Dublin, la contralto Cibber hizo tal interpretación de este aria, que un asistente saltó de su asiento y dijo: Mujer, por esto todos tus pecados deberían ser olvidados.
Why do the nations es una magnífica aria para bajo con terribles exigencias en cuanto a agilidades y afinación.
El Mesías no
tendrá piedad con los enemigos de la fe en su segundo advenimiento, advenimiento
que todos celebraremos uniendo nuestras voces en el conocido coro Hallelujah.
Sobre este coro se ha escrito ya de todo.
Llegamos ya a la tercera parte de este Oratorio. La esperanza de la vida eterna, conseguida por el sacrificio de Jesús, es lo que nos depara el primer número de esta parte, la dulce aria de soprano I know that my Redeemer liveth. Por su muerte hemos sido salvados y el coro Since by man medita sobre esta idea y muestra su alegría desbordante por este hecho.
Toda la tercera parte nos lleva al triunfo final del Mesías, en el impresionante coro Worthy is the lamb, secundado por la bellísima fuga Amen que pone un impecable broche a casi dos horas de oratorio.
El estreno en Londres, casi un año después, el 23 de marzo de 1743, planteó dudas sobre la conveniencia de realizar la obra en una casa de juegos en lugar de una iglesia. Dado el tema sagrado del oratorio y la nota de Haendel en su manuscrito original que decía “A Dios solo la gloria”, es difícil imaginar que cualquier público pudiera haber interpretado la música como algo menos que devoto. Pero los obispos anglicanos no pensaban lo mismo y lo tacharon de blasfemo. Qué cosas.... También fue la actuación de Londres la que estableció una tradición que continúa hasta el día de hoy, descrita por un observador: “Cuando el coro cantó “para el Señor Dios Omnipotente' (en el “Coro de Aleluya”), estaban tan conmovidos que todos juntos, con el Rey Jorge, se pusieron en marcha y permanecieron de pie hasta que terminó el coro ".
El escultor francés Louis Roubiliac usó el Mesías como tema
para el monumento de Handel en la Abadía de Westminster, dedicado tres años
después de la muerte de Handel.
“El Mesías” fue sin duda la pieza central de la carrera de Haendel. El 6 de abril de 1759, el compositor hizo su última aparición pública, dirigiendo su oratorio en Londres. Ocho días después, murió a la edad de 74 años. Su funeral, celebrado en la Abadía de Westminster, atrajo a unas 3.000 personas. Si bien “Mesías” era ciertamente considerado por cualquier audiencia como un "gran entretenimiento musical", como a veces se le llamaba en los días de Haendel, se supone que el compositor dijo: "Lamento si solo los entretuviera; quería hacerlos mejor."
Espero que "El Mesias" o "Mesías", esta magnífica obra que nos llega directamente al corazón, sea una buena compañía para esta noche que, seguramente, no podemos gozar de la compañía de nuestros seres queridos. Y Feliz Navidad... a pesar de todo...
Buenas noches. Bona nit. Καληνύχτα. مَساءُ الخَير . Gabon. 굿나잇. Boas noites. 晚安 Bonne nuit グッドナイト Buonanotte. לילה טוב. Oíche mhaith. Wengi alus. Bones nueches. اچھا شام Noson dda. Good night. Спокойной ночи. Guten Abend. শুভ রাত্রি. Laku noć. Bon lannwit. Fie.
¡Cuidaos mucho!
Otras fuentes
https://www.mundoclasico.com/articulo/468/El-Mes%C3%ADas
Compartido, querida Victoria, gracias por esta y otras maravillas de tu blog.
ResponderEliminarQue el Nuevo Año nos sea propicio y bienhechor.
Mis cariños y un enorme abrazo fraternal.
Salud
Querida Sonsoles. Siempre es una alegría encontrarte por aquí. Gracias a ti por acompañarme siempre.
EliminarCon mis deseos de que el 2021 sea el año de la salud, un abrazo inmenso e intenso.