viernes, 27 de marzo de 2020

Marco Mezquida y "El sueño de Ravel"

En tiempo de confinamiento "la música es un estado de ánimo que sale de la Tierra" (*)


Es indudable que cuando escuchamos música, ésta tiene un efecto en nosotros, nos emociona, nos moviliza, acelera nuestro ritmo cardíaco, nos hace recordar etapas de nuestra vida… La emoción viene provocada porque despierta unas expectativas con respecto a lo que vamos escuchar. Pero la emoción varía si estas espectativas se confirman o no.


No sé qué expectativas tenía yo el viernes 28 de febrero cuando iba hacia el concierto que Marco Mezquida iba a dar en La Sala de Argentona, pero lo cierto es que no me esperaba lo que me encontré. La simbiosis jazz-música clásica fue una emocionante sorpresa. La cercanía del jazz y la música clásica ha producido históricamente obras muy interesantes; un esfuerzo que ha tenido siempre reconocimiento y aplauso en los dos campos. Pero nadie hasta ahora había hecho algo obvio: ver qué aportaban los impresionistas como Debussy o Ravel al jazz. De este último hablaremos esta noche de la mano de Mezquida.

Quien conozca la indómita e inclasificable naturaleza de Marco Mezquida sabe que es capaz de todo y que no le tiene temor a nada. Mezquida es un músico versátil, pianista de jazz, improvisador y genial compositor. Nacido en Menorca hace 32 años su humildad es como una bendición, una brisa de aire fresco que mejora todo lo que toca y hace que este “Ravel´s Dreams” vuelva a ser otro hito en la ascendente carrera de un gran musico y persona que, como él dice, quiere “llevar a la audiencia a un viaje”.

En este álbum, Marco Mezquida se lía la manta a la cabeza y se adentra en el onírico mundo (¿jazzero?) del musico vasco francés Maurice Ravel y nos lo devuelve envuelto en improvisaciones y blue notes. Para ello nos ofrece una recreación personal y única de la música del genial impresionista: la impregna de groove, la expande a través de la improvisación y le insufla texturas de la música contemporánea. Un sueño a través de la modernidad de su legado y el eclecticismo de las músicas que le sedujeron: del clasicismo francés a los virtuosos románticos, de la experimentación con la música popular a la influencia de sus contemporáneos y la efervescencia del jazz. 

Y lo hace contando con la inestimable ayuda de dos músicos jóvenes y atrevidos como él, el cubano Martin Meléndez al cello y el batería y percusionista catalán Aleix Tobias. Muy bien elegido el cello frente al contrabajo, por sus texturas musicales más clásicas que jazzeras y lo mismo con la batería: gran uso de la percusión, muy variada.  La apuesta está clara, intentar descifrar los sueños de Ravel, si es que Ravel soñaba, y trasladarlos a una música que Ravel conocía y parecía amar, el jazz. Ravel conoció el jazz de finales de los años 20 cuando recorrió los Estados Unidos en una larga gira e incorporo detalles de esta música a sus composiciones milimétricas y preciosistas.

Las obras que eligió Mezquida para el concierto podrían haber sido otras, tanto da. Imposible resaltar unas sobre otras.  Lo importante es que extrae lo mejor de la intensidad raveliana, de la fuerza y musicalidad, un tanto ibérica, de esos temas y lo mejor del piano actual de jazz, algo de lo que el menorquín sabe mucho. Da gusto poder deleitarse con la delicadeza y la pasión que pone este trio en composiciones como Le Tombeau de Couperin, el segundo movimiento del Cuarteto de cuerda que transcriben a su manera al completo, la Pavane o el fantástico adagio del Concierto para Piano, una de mis músicas preferidas del siglo XX que, por cierto, bordan. 


Como era de esperar, no faltó el famoso Bolero, que dejaron para el final. Sabia elección de Mezquida comenzarlo en la plenitud del tema; así el crescendo se mantiene, algo que le permite muy rápidamente pasar a la improvisación.


Durante todo el concierto, Marco y sus acompañantes consiguieron que la música de Ravel mantuviera su esencia y que su poder permaneciera. Sonó sensual y elegante, orgullosa y amarga, vanguardista y clásica a la vez. Los sueños de Ravel, fue un encargo de L’Auditori que se estrenó el 20 de febrero de 2016 dentro de los proyectos Revisitings en la Sala 3. La obra fue recibida con una acogida entusiasta por parte de la crítica y del público, y cautivó tanto a audiencias aficionadas al jazz como a la clásica.
"Prodigio", "mago", "el músico total", "prestidigitador", "magnético", "fuera de serie". Esos son los adjetivos que podréis encontrar repasando las críticas que de sus discos y conciertos hay a lo largo y ancho de internet.  "Cuanto más tocaba, más difícil era comprender cómo su cerebro era capaz de realizar cambios en forma y sentimiento, en fracción de segundos, de una manera tan orgánica y fluida. El término sorprendente suele usarse como un cliché sin significado. pues no es este el caso ", The New York City Jazz Record.


Todo esto y más se ha dicho sobre Marco Mezquida; ya no es una estrella en ascenso sino una realidad de la escena musical española, uno de los artistas más brillantes y prometedores en décadas. Sus intereses eclécticos se unen a una amplia gama de géneros: Jarrett, Schubert, Chopin, Evans, Rajmaninov o Bley, por nombrar unos pocos, se funden exquisitamente en el ADN su musica.  Su poder creativo es abrumador, integrando estas influencias en su expresividad con intersecciones inesperadas que han surgido en su camino. A pesar de su juventud, cuenta a sus 32 años en su impresionante currículum con 50 discos grabados, 17 bajo su propio nombre, cientos de conciertos, y composiciones para teatro y televisión. También aparece en muchos proyectos de compañeros, lidera sus propios grupos, trabaja en dúos junto a otros pianistas además de ser profesor en la High School of Music,  en el Taller de Músics y en Liceum Conservatoire y desarrolla sus propias composiciones, improvisaciones y arreglos.

Para acabar este retrato, entre su basta obra cabe resaltar estos álbumes: “Sing My Heart”, “Llunàtics”, “Conexión” junto al guitarrista flamenco Chicuelo (que merece una entrada en este blog) y este “Ravel’s Dreams” que ahora nos ocupa y donde afronta un reto totalmente distinto a los anteriores. En definitiva, creo que puede ser una buena propuesta para esta noche de confinamiento.
Por último, como guinda de este maridaje, los "Valses nobles y sentimentales (I)" enriquecidos con improvisaciones maravillosas que se deconstruyen virtuosamente. 


Y ya sabéis: QUEDAOS EN CASA. Buenas noches. Bona nit. Καληνύχτα. مَساءُ الخَير . Gabon. 굿나잇. Boas noites. 晚安 Bonne nuit グッドナイト    Buonanotte. לילה טוב.  Oíche mhaith. Wengi alus. Bones nueches. اچھا شام Noson dda. Good night. Спокойной ночи. Guten Abend. শুভ রাত্রি. Laku noć

(*) Cuando empecé a escribir esta entrada hace algo menos de un mes, tenía muy claro donde había leído u oído esta frase. Ahora, tengo dudas. Creo que viene de un libro que he leído recientemente: “Mañana no será lo que Dios quiera”, una biografía novelada del poeta Ángel González, a cargo de Luis García Montero... creo…

Fuentes
http://marcomezquida.com
https://www.todalamusica.es/marco-mezquida-los-suenos-raviel/
https://www.auditori.cat/es/marco-mezquida--los-suenyos-de-ravel
https://auditorioteatrolaspalmasgc.es/noticia/marco-mezquida-vuelve-al-rincon-del-jazz-con-los-suenos-de-ravel/835
https://marcomezquida.com/discos-i-grups/
https://www.docenotas.com/142690/marco-mezquida-ravels-dream-la-interpretacion-los-suenos-jazz-ravel/